"El pueblo donde nunca pasa nada". Con este eslogan, una original campaña sacó hace unos años al pequeño municipio de Miravete de la Sierra del anonimato. Se trata de un pequeño ejemplo de una realidad muy presente en la provincia turolense: ante la despoblación, ingenio.
Los datos hablan: el anuario del 2010 elaborado por Fundear recoge que cinco de las ocho comarcas menos pobladas están en Teruel. Se trata de del Jiloca, Matarraña, Maestrazgo, Sierra de Albarracín y Bajo Martín. Ante esta situación, no faltan las propuestas que van más allá de las ayudas gubernamentales.
Famoso es el caso de Aguaviva, pionero en una iniciativa extendida después a otros lugares: ofrecer trabajo y facilitar la vivienda a familias inmigrantes que se animaran a repoblar la localidad. El alcalde y presidente de la Asociación Española de Municipios Contra la Despoblación, Luis Bricio, reconoció que desde el 2000 --cuando se puso en marcha el programa-- no han faltado los problemas de integración, aunque el resultado es positivo.
Con esta campaña Miravete de la Sierra, que tenía sólo 12 habitantes, aumentó un 489% gracias a una campaña de turismo emitida solo en TV temática y apoyada en wwww.elpuebloenelquenuncapasanada.com
El pueblo cuenta ya con 715 habitantes y la cifra sigue creciendo.